Las trufas de castañas son un regalo especial para las fiestas, pero también son una excelente manera de presentarles a las personas el sabor de las castañas: son lo suficientemente sofisticadas como para servirlas en una fiesta, pero lo suficientemente simples como para prepararlas usted mismo. Estos ricos y lujosos bocados de puro sabor a castañas son en realidad bolas de puré de castañas cubiertas de chocolate espolvoreadas con pistachos molidos o coco.
El proceso para hacer trufas de castañas es bastante sencillo: tueste algunas castañas frescas, hágalas puré en un procesador de alimentos con un poco de azúcar y crema, forme bolas, páselas por chispas de chocolate derretidas y enfríe.
Si está buscando ser creativo, puede intentar agregar una guarnición o nueces picadas o coco, o diferentes especias y extractos a la mezcla para variar.